Miles de kilómetros
Inglaterra (km 0)
Barcelona (~1800 Km)
Muestra del Festival de la Llum 2020 en Glòries |
Berlin (~ 3300 km)
Barcelona (~ 4800 km)
Ya promediando el mes se comenzaba a hablar de casos del famoso virus de oriente que comenzaban a aparecer en el sur de Alemania y explotaba por el norte de Italia, en España apenas se hablaba del tema, pero a fines de mes comenzaron los casos en Madrid y se contabilizaban unos 5 o 10 en Barcelona esos primeros días de Marzo.
Buenos Aires (~ 15300 km)
El viernes 6 de Marzo subí a un avión con tan pocas complicidades que apenas dos personas en tierra destino que sabían de mi arribo: el primer viaje por completo sorpresa, quería recargar energías, quería llenarme de pilas, de afecto y salir a devorarme el mundo!
A la semana siguiente a mi arribo a la capital Argentina, los registros de casos en Europa del famoso virus de lejano oriente se disparaban a montones, Madrid pasó a ser zona cero, Barcelona estaba repleto de casos que brotaban como setas. El mundo entero se asombraba de la situación donde Italia y España se convertían en epicentro occidental de lo que pasó a ser ya una pandemia, eso que oíamos hablar en los libros de historia, era real, y estaba pasando.
Delicias de Güiraldes, un clásico de Lugano |
Claramente si hay un momento crítico, donde se disparó el recáculo de ruta fué ese período de purgatorio si se quiere, aunque nunca mejor que un purgatorio en casa con tus padres y todas la comodidades de un mundo hiperconectado, en los que me hallé Atrapado en Argentina.
Barcelona (~ 25800 km)
Un mes y días más incluso, tardé en retornar a lo que se podría decir a ese momento llamaría mi casa, un lugar que en el último año había pasado menos de 2 meses, pero seguía anhelando regresar, y lo logré a las 2 am de un 12 de Mayo, y me esperaban con abrazos y berenjenas rellenas.
AR1130 primer vuelo con pasajeros desde Buenos Aires a Madrid tras el lockdown |
De repente estaba donde quería estar pero no donde se suponía que debía estar.
Comenzaba a retornar el calor, la apertura se hacía progresivamente, los primeros días se podía salir de casa apenas 1 hora al día, y a las pocas semanas, casi sin escalas ocurrió lo que veíamos venir, las mareas humanas se agolparon en las calles disfrutando del aire libre, con una urgente necesidad de algo tan español como ese gen inalienable de la interacción social y la necesidad intrínseca de ir de bares poco tardó en desmadrarse.
El verano llegó al hemisferio norte, y con ellos la famosa campaña para que los turistas vuelvan a España, un lugar seguro, no sea cosa que se pierda la temporada.
Atardeceres desde Borbó |
Dos, tres semanas tal vez, duró el periplo antes de que se comience a hablar de rebrotes aquí y allá, en España, la tierra del buen clima, la fiesta y el buen comer, se convertía en el centro de atención por las malas noticias.
Berlin (~ 27300 km)
Y aquí es donde el re cálculo intenta retornar a su curso, quién sabe si tal vez hasta forzando la situación: recuerdan esa escapada allá por el kilómetro 3300? Pues las cosas salieron bien y se suponía que en Mayo mi vida nueva comenzaría en un nuevo país, una nueva ciudad y una nueva realidad, pero de repente la realidad para ese entonces era otra bien distinta. Re calculando
Seguí, no sin titubeos ni cláusulas anexas, mi camino, porque este año si algo se suponía que iba a ser directo, todo terminó siendo lleno de parches y caminos alternativos.
Siegessäule: Columna de la Victoria |
Barcelona (~ 28800 Km)
Berlin (~ 29000 km)
Barcelona (~ 31000 km)
Foradada del Montsia, y el delta de fondo |
Patas para arriba
Quién no haya cambiado alguno de sus planes este año, su enfoque, su prioridad y sus hábitos, más allá de una simple mascarilla (bien puesta por favor!), sepan que lo se, me están mintiendo.
No, yo no soy una excepción como esos